Con un lleno completo en los tendidos y gozando de una tregua en la lluvia, pero con fría noche se dió el tradicional festival cuyos fondos van al Hospital Infantil, es una obra benéfica que crea afición, desde los pequeños pacientes, familias y comunidad entera del eje cafetero se matriculan y son fieles a la tauromaquia y por ello el rito solemne con la procesión de la vírgen incluída, el minuto de silencio y los himnos dan la altura y majestuosidad, que la plaza merece y así hicieron el paseíllo y lidiaron, EL JULI, quien al frente de «Centellita» qué le permitió desarrollar su labor técnica hasta cuándo el novillo se rajó y abrevió matando a su estilo, escuchando palmas. EMILIO DE JUSTO con «Molino del viento» de 424 kgs, feo de hechuras, dónde el diestro mostró qué le puede a todos los toros, y formó un lío con su entrega, sitio, técnica y conocimiento, llegando a que parte de la concurrencia pidiera «indulto», qué no cuajó afortunadamente y mató con «defectuosa», cortando un apéndice y » palmas en el arrastre»; JOSÉ ARCILA con «Califa» de 420 tuvo momentos de inspiración, emulando pasajes de la tauromaquia antigua, quedando sólo en ésos destellos y mató con defecto debiendo descabellar, con ovación del respetable. JUAN ORTEGA con » Pierdes» de 394 e inválido qué el palco, no se percató y el torero no supo o pudo «curar» y su labor se vino a menos, máxime cuando desarmado, y todo al «abismo» incluída la suerte suprema, qué fué un fiasco, con recado presidencial y protestado por el público. DAVID MARTÍNEZ con «Reyecito» de 426 kgs, tuvo clase y calidad en su embestida, qué no pudo interpretar el torero, y su labor fué «intrascendente» que con pinchazos con los aceros, pasó angustias. ROCA REY con «Cuentero» de 406 kgs, tanto con el capote y muleta, y fiel a sus argumentos, estructuró un faenón de alma y señor mío, por la variedad, quietud y determinación soñada, qué hizo sonar el pasodoble «feria de Manizales» y al son de gritos de «torero..torero» puso la plaza boca abajo, tanto qué pidieron el indulto y sin ser mayoritaria la petición, la presidencia se precipitó en sacar el pañuelo amarillo y dos orejas. Vino la atracción y postre del banquete taurino, con la presentación del niño MARCOS PÉREZ, con un «becerro» «Dante» cómo la literatura del italiano, fué una verdadera apoteosis, además nos enteramos qué tal salmantino lo acompaña en sus presentaciones, un grupo familiar qué conectan antes, durante y después de cada faena, gozando y sufriendo, con lágrimas de emoción, como las de ésta noche porque ha demostrado su solvencia, variedad, recursividad, sitio y poder, qué espectáculo verlo mandar, templar y ligar y ya no es una promesa sino una realidad que levantará plazas y afición a su paso en el futuro, destacamos qué le brindó al maestro Rincón y cuando finiquitó su labor con las orejas cortadas el maestro lo llevó en hombros, en la vuelta triunfal, y nadie se movía en los tendidos, pues era un sueño hecho realidad, y qué el mundo taurino, reunido en Manizales, fué testigo de semejante gesta.
FICHA DEL FESTEJO.-
EL JULI.- palmas.
EMILIO DE JUSTO.- oreja.
JOSÉ ARCILA.- ovación.
JUAN ORTEGA.- silencio tras aviso.
DAVID MARTÍNEZ.- vuelta tras aviso.
ROCA REY.- dos orejas tras indulto.
MARCOS PÉREZ.- dos orejas.
Textos y redacción :GABRIEL ENRIQUE RIVEROS.
Fotografía especial y profesional DIEGO ALFONSO ALAIS.
