Sevilla cerró su ciclo de una interesante y atractiva temporada taurina, restando únicamente el tradicional festival del 12 de Octubre, y por ello el festejo que clausuraba San Miguel, en su día del santo se programó un plato fuerte, dónde inicialmente se contempló la despedida de dos maestros (Ponce y Hermoso de Mendoza), acompañados por el “santificado” Morante, pero el misterio y el enigma torero, fué modificando (depurando) el cartel, y no fué por dinero, que la empresa lo tiene y recompensa a los actuantes de manera justa a sus pretensiones, sino una serie de circunstancias qué solamente los apoderados y el empresario llevarán el secreto para sus adentros, de tal suerte que a la final y dadas las diversas causas conocidas públicamente, hicieron el paseíllo en realidad, PABLO HERMOSO DE MENDOZA.-(Negro y plata) quien se despedía en activo en éste icónico coso sevillano, qué muchas tardes de gloria cosechó con triunfos rotundos, de ahí que con su lote del hierro de San Pelayo del maestro Capea, logró dos faenas típicas de su corte y tauromaquia, más pura y con emoción profunda, la primera porque el pupilo de San Pelayo era una máquina de acometividad dónde el caballero en plaza con sus jacas toreras, “Berlín” “Ilusión” y “Generoso” fueron fieles súbditos de su amo para todas las suertes, lástima qué pinchó en varias ocasiones su labor, quedando al final con palmas para los dos y con su 2° con el mismo libreto, pero con ejemplar venido a menos, estructuró una faena más de corazón qué de lucimiento externo, qué remató al segundo intento donde el palco generosamente le entregó por “cortesía” el único trofeo del festejo y para los de a pie saltaron a la arena del hierro de O. Jiménez y G. Jiménez, para JUAN ORTEGA.- (Tabaco y oro) Otro profesional que no solamente permite soñar e ilusionarse por sus finas y relentísimas faenas, sino que ha reeditado y frenado el tiempo cuándo le aflora la inspiración profunda en la cara del rey de la fiesta (toro) y con su lote en suerte “Terremoto” y Veraneante” nos dejó lo más bello, estético y de finísimo valor (saborío) con el capote en dos tiempos, cuándo paró el reloj a las 7:04 en ése excelso y sublime ramillete de veerooniicaas de magestuoso trazo que aún seguimos soñando y a las 7:07 entre la primera y segunda vara, se vivieron otros instantes de gloria y evocación extrema a otras pinceladas de máxima categoría, no solamente afloró arte, sino toda una sazón que satisfizo a los más exigentes paladares, y todo indicaba que venía un plato fuerte con la suprema presentación o degustación, para los invitados en el magno acontecimiento, pero por los caprichos del “manso” dejó a todos ensayados en su paladar y cómo la canción “todo se derrumbó” quedando al final en ovación para el sevillano y algunos pitos en el arrastre y con el 5°, sin los matices de ilusión o evocación del anterior tampoco pudo hacer más que transitar por caminos escabrosos, con un protagonista cansado que amagó para cambio, que tampoco se dió y el matador con destellos lo llevó al final, recibiendo otro saludo desde el tercio mientras su oponente se fué pitado en el arrastre y cerraba el cartel PABLO AGUADO.- (Celeste y oro) torero que está llamado al relevo generacional, pues aún recordamos su explosiva y fulgurante tarde del 10 de Mayo del 2019, dónde hizo rugir y explotar ésta señorial plaza, cuando cortó cuatro (4) orejas desatando una locura pasional y frente a su lote en suerte “Veraneante” y “Clandestino” a su manera trató de imitar lo trascendental de su compañero, pero no tuvo las características del “ ralentí” ni la majeza, se le abona la voluntad y poco para comparar o valorar porque sus oponentes, se rajaron pronto y bajaron la persiana, no solamente mansearon sino se volvieron caprichosos y a regañadientes embestían con arreones, quedando al final su actuación en silencio y saludo, mientras los despojos se fueron protestados al desolladero y así el banquete no fué lo esperado para los selectos invitados, pero la gente despidió cariñosamente a todos los actuantes!!
Resumen del Festejo.-
HERMOSO DE MENDOZA.- Silencio y Oreja.
PABLO AGUADO.- Silencio y Ovación.
JUAN ORTEGA.- Ovación y Ovación.
Incidencias: El encierro aceptable en presentación y juego, de mansos porque no llegaron sino hasta el segundo tercio y ahí se derrumbaron, aclarando qué los de San Pelayo fueron los más destacados de la corrida!!
Fueron ovacionados Juan Sierra y Fco Javier Araujo de la cuadrilla de Pablo Aguado de la cuadrilla de Pablo Aguado, tras parear al 3° y en varas Manuel Quinta por el 5° toro picado en suerte de Juan Ortega!!
Textos y redacción especial para Arte y temple: GABRIEL ENRIQUE RIVEROS R.
Fotografía profesional y artes gráficas en diseño:DIEGO ALFONSO ALAIS.